Jugó con uno más desde el minuto 60 y desperdició opción increíble de gol.
Los videos de Américo, La Noche y Marco Antonio Solís que en el entretiempo dieron vida a las pantallas gigantes del Estadio CAP, fue lo único agradable que los hinchas navalinos vieron ayer ante Puerto Montt.
Es que los del Ancla perdieron 0-1 y con agravantes, pues desde el minuto 60 jugaron con uno menos por expulsión de Patricio Peralta (doble amarilla).
Inmediatamente después de esa situación, y cuando los salmoneros le discutían el cobro al juez Cristián Basso, los choreros dispusieron de su mejor opción de gol gracias a una avivada que dejó a Manuel Gutiérrez solo frente al arquero Carlos Espinoza, pero que desperdició al pegarle desviado al balón, quizá creyendo erróneamente que la acción estaba viciada.
Esa poca contundencia del moreno delantero, el excesivo traslado del balón, centros sin destino y falta de claridad en la conducción condenaron a los albiazules a sufrir una nueva decepción en el torneo. Ni la ausencia de 10 jugadores por lesión o castigo fueron atenuantes.
Peor aún, frente a ellos tuvieron a un equipo casi tan malo como el colista Osorno, que aparte del gol dispuso apenas de 2 tiritos , los que llegaron mansos a las manos del portero José Acevedo.
En un malo primer tiempo, Naval sólo intentó morder con un remate de Gutiérrez a los 31 y otro de Francisco Castillo a los 44 , ambos despejados por el último defensor, y con un cabezazo de Freddy Tapia que atrapó magistralmente Espinoza.
En el complemento, y a parte del fiasco de Gutiérrez, lo único de valor del local fue un remate de Boris Sandoval que Espinoza atajó de manera brillante a los 55 , y otro cabezazo de Tapia que dio en el travesaño a los 86 .
Quien sí estuvo certero fue Jonathan Novoa, pues a los 76 sacó un disparo en el área grande para desnivelar el marcador y terminar terremoteando a Naval.
